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Propiedad particular.Existe en las inmediaciones un vértice geodésico.La torre ha sufrido dos reformas. En 1967, se tapiaron las aspilleras y se reconstruyeron las partes perdidas, levantando la altura de los muros y almenarando la torre; también se arreglaron los vanos y se abrieron el balcón y la puerta en el lado sur. Además, se construyeron los solados interiores y una terraza. Posteriormente, la torre se cerró debido a la afluencia de vándalos. El balcón perdió su barandilla y se cerraron con tablas los vanos. En 1998 se reformó la entrada y se puso la puerta actual.Torres Mena, al describir la localidad de Olmedilla de Alarcón dice: “diseminadas por el término se hallan además dos casas de huertas, una casa-tejar, otra de peón caminero, una torre telegráfica”. Sobre el personal que sirvió en esta torre al comienzo de su vida útil tenemos bastante información. Esta es una de las torres cuyo levantamiento fue supervisado por el Torrero de 2ª, D. José Miguel. Por esa época, entre el 15 de septiembre de 1849 y finales de febrero de 1850 ya sirvió en esta torre como torrero alumno D. León Estrada, y en ella fue promovido a torrero de 3ª clase, culminando con éxito su formación. Igualmente conocemos que, en el mismo mes de febrero de 1850, estaban prestando servicios también en ella el torrero D. José Muñoz y el ordenanza D. Prudencio Villamil.
Conservación:
La edificación ha sufrido reformas que han modificado su aspecto. Conserva en todos los lados los zócalos y la moldura de cuatro hiladas de ladrillo. Los esquinales son de piedra y el primer cuerpo, ataluzado, presenta las aspilleras tapiadas. En la fachada sur una puerta y, en el piso superior, un balcón sin barandilla, ambos recientes. Conserva el revoco original. La fachada este presentaba dos fuertes pérdidas de material que fueron rellenadas por la reforma, conservando la forma original ataluzada pero tapiando las aspilleras. Sus dos vanos han sido reducidos y errados por tablazón de madera. La altura original se conservaba hasta el dintel de la ventana superior. Esta fachada muestra tapiados los huecos de andamiaje y restos del encalado fino del lienzo. El lado septentrional es el único que no abre ningún vano, ni original ni añadido, y debía conservarse hasta una altura de unos 8 metros. Muestra también restos de encalado de tono amarillento claro. En la reforma se le añadió en este lado el desagüe de la terraza superior. El lado oeste, por último, conserva la puerta original, mostrando sus cercos de ladrillo, aunque transformada en ventana. La ventana superior fue reconstruida.
En el blog Territorio Abandonado se puede ver un interesante artículo gráfico sobre el estado actual del interior.
Referencias:
ibercastillos.org Olmedilla de Alarcón
(Jesús López Requena, 2008)
(Jesús López Requena, 2010)
