Selección sobre la historia de las telecomunicaciones
Preámbulo: Manuel Avendaño Gascón
Fue en los años 2017 y siguiente cuando José María Vázquez, en su feliz ancianidad, según él mismo la calificaba, aceptó la invitación que le hice, en nombre del Foro Histórico, a que nos ilustrase con sus amplios conocimientos e historia profesional única en la evolución de las telecomunicaciones españolas.
El 10 de octubre de 2017 respondió a una primera solicitud presentando una documentada ponencia titulada ‘Einstein visto por un ingeniero’ en la Jornada sobre Premios Nobel precursores de las Comunicaciones Ópticas, en la que mostró los dos criterios -contradictorios- sobre Einstein: De un lado, sus aportaciones a las telecomunicaciones poco relevantes, como el propio Einstein indicaba, pero, por otro, su artículo publicado en 1905 sobre producción y transformación de la luz fue lo que justificó que le concedieran el Premio Nobel en 1921. José María Vázquez concluyó que Einstein es una figura enorme que la Ingeniería tiene tanto derecho a reivindicar como tiene la Ciencia, incluso si se piensa en el poco aprecio que alguna vez declaró por nuestro tipo de actividad.
En esa Jornada, la presentación de otra de las ponencias, ’Los premios Nobel en el Bell System e ITT durante el siglo XX’ despertó la curiosidad de José María Vázquez que me comentaría en un correo: En particular la historia de ATT e ITT me pareció muy interesante y bien traída, pero como si le faltara un plano donde interactuaron la política, la legislación sectorial y la ley Sherman, además de los jueces. También los fuertes impulsos venidos desde la industria informática en su choque con las Telecos. Me chocó que se presentara su evolución, empresarial y de investigación, como fruto de acuerdos puramente empresariales, sujetos, pues, a una lógica empresarial relativamente incontaminada.
Naturalmente, mi reacción inmediata fue proponer a José María Vázquez que escribiese su artículo sobre la 'Ma Bell’s divestiture’, de tanta trascendencia para la evolución de las telecomunicaciones. El 25 de octubre me envía lo que él define como “una muestra sobre la historia de las telecomunicaciones que he encontrado buscando otra cosa. Se refiere a los aspectos económicos, políticos y judiciales desde el origen hasta el desmembramiento de ATT. No trata de la evolución de las tecnologías. No estoy en condiciones de comprometerme a nada de momento, pero prefiero comentártelo antes de que vuelva a enterrarse si no le ves interés”. Es precisamente la Contribución Relevante que sigue a este preámbulo.
ATT llegó a ser un objetivo a batir para el Gobierno de EEUU. La Gran Depresión enfrentó a la opinión pública con los Gobiernos, pero también contra las grandes Corporaciones. Como excepción, ATT (Ma´Bell) llegó a capturar una confianza popular que suponía un capital enorme en crédito social, el gran alimento de los políticos. Malas migas. El fuego amigo es el mayor peligro para ATT.
ITT viene de poco antes de la Gran Depresión, pero es el Gobierno quien limita el poder económico de ATT: No podrá crecer fuera de EEUU. Está obligada a vender sus empresas europeas. ITT y Telefónica nacen ya separadas de la casa matriz por imperativo legal, no por acuerdos empresariales.
Y es el Gobierno el que busca rasgos de abuso de poder de mercado por parte de ATT, que termina en el Final Judgement con el resultado sorprendente de que la actuación de ATT ha sido beneficiosa para el país, y que no hay que corregir lo que funciona tan al gusto de todos.
La Telecommunications Act de 1934 tiene que dedicarse a otros servicios, singularmente a los de radio, desde el momento en que la telefonía se escapa de su ámbito. La regulación de la competencia no desarrolla doctrina avanzada en su aplicación a las telecomunicaciones. Y eso se nota en Europa cuando llega el momento. Nos falta ese liderazgo de EEUU en materia de regulación de mercados de telecomunicaciones.
La estructura corporativa de las Telecomunicaciones es diferente en EEUU y en Europa. La regulación se adapta en Europa al carácter de Administración Pública de los grandes operadores, los PTT¨s, con tropezones como Telefónica. Las grandes infraestructuras técnicas, las redes, son muy diferentes en los tramos de acceso de EEUU y de Europa, y es ahí donde se esconden las mayores dificultades para que penetre una regulación eficaz. Pero EEUU tiene poco que aprender de Europa mientras que Europa debe inventar su regulación sin poder copiar de la gran maestra. Claro que la influencia de lo que ocurre en EEUU es muy fuerte entre nosotros, y explica alguna de las peculiaridades de nuestra historia regulatoria y de mercado, pero nos quedamos con una inspiración venida desde EEUU, pero distante en cuanto a los perfiles concretos de su aplicación real.
El papel de las Baby Bell travestidas de operadoras de cable en Europa como puntas de lanza para la rotura de nuestros monopolios fue el detonante de todo un giro do nuestra política de I+D tan influida por las telecomunicaciones.
Con esos antecedentes, puedes imaginar que ya podría iniciar nuestra historia. Sin ellos, aparecerían grandes decisiones ayunas de justificación en nuestra política europea. Claramente, lo que te anticipé tendría su mayor sentido como antecedentes para la evolución europea, como no se te ha escapado.
Y ahora tengo un problema: He vivido desde muy dentro la evolución de las Telecomunicaciones españolas desde nuestra posguerra hasta la liberalización. No estoy en condiciones de pretender una versión compartida de lo que hemos hecho en ese tiempo. Todo lo que viví y mucho de lo que hice está aún muy sujeto a opinión de otros, algunos de los cuales viven, gracias a Dios. Podría trabajar en unas memorias que me implicaran sólo a mí, pero me sentiría defraudando la buena fe de cualquier lector si pretendiera hacerlas pasar por una Historia. Y el valor de unas memorias personales puede ser algo para el autor, pero no tanto para un foro histórico.
De ahí mis reservas, amén de mi desconfianza en el límite de mis fuerzas.
El 24 de noviembre 2017, respondiendo a mi pregunta sobre el artículo me contesta con las siguientes reflexiones:
Leo ahora sobre la pugna entre el DoJ de EEUU y ATT, y me vuelve a la memoria su larga historia, tan teñida de malquerencia y tan trascendente en la formación de criterio en la UE. Y veo lo que ha de pasar a partir de ahora como un episodio nuevo de sus persistentes desavenencias. Y revivo la misma sensación de desacomodo que tantas veces sentí, pero ahora no tengo responsabilidad ni posibilidades de aportar algo útil.
He vivido desde muy dentro la evolución de las Telecomunicaciones españolas desde nuestra posguerra hasta la liberalización. No estoy en condiciones de pretender una versión compartida de lo que hemos hecho en ese tiempo. Todo lo que viví y mucho de lo que hice está aún muy sujeto a opinión de otros, algunos de los cuales viven, gracias a Dios. Podría trabajar en unas memorias que me implicaran sólo a mí, pero me sentiría defraudando la buena fe de cualquier lector si pretendiera hacerlas pasar por una Historia. Y el valor de unas memorias personales puede ser algo para el autor, pero no tanto para un foro histórico.
El Foro Histórico pretenderá destilar valor para el futuro. Hacia el futuro enseñan mucho más los errores que los aciertos pasados. Si la evocación ha de ser buena maestra tendrá una cuenta de errores nutrida. Mientras quienes los cometimos sigamos aquí, sería injusto y doloroso para muchos, que acertaron mucho, devolverles un retrato deformado e ingrato.
El 26 de noviembre de 2019 en la Jornada Homenaje a José María Vázquez, su viuda me comentó que unos días antes de fallecer mostró su preocupación ante las limitaciones físicas para completar su compromiso con el Foro Histórico.
José María era un caballero, un ingeniero, un compañero.
Manuel Avendaño Gascón.