Félix Pérez, destacado miembro del Foro Histórico de las Telecomunicaciones, pronuncia su discurso de ingreso como Académico Numerario en la Academia de las Ciencias y las Artes Militares
Félix Pérez Martínez, Doctor Ingeniero de Telecomunicación y Catedrático del Departamento de Señales, Sistemas y Radiocomunicaciones de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Telecomunicación de la Universidad Politécnica de Madrid, así como Colegiado de Honor en 2017 e Ingeniero del Año 2020, por el COIT/AEIT, pronunciaba su discurso, el pasado 8 de febrero, de ingreso como Académico de Número de la Real Academia de Doctores de España y de la Academia de las Ciencias y las Artes Militares.
"Ser acogido en una academia cuyo fin es fomentar la cultura en el ámbito militar de la sociedad española, colma todas mis expectativas y lo que puedo asegurar es que pondré todo mi esfuerzo en no defraudar la confianza que han depositado en mi persona".
Bajo el titular del discurso "La transformación digital en los nuevos escenarios de conflicto del campo de batalla digital al campo de batalla inteligente", Félix Pérez agradece, en primer lugar, a la Academia por su admisión como académico de número y, en particular, a los generales en división don José Carlos de la Fuente, don Juan Antonio Moliner y don José Manuel Roldán por avalar su candidatura. Da su reconocimiento especial a "su querido Charlie", general de división, como su padrino de ceremonia.
Reconoce, a su vez, a todas aquellas instituciones, apoyo de sus numerosas actividades e investigaciones en el ámbito de la defensa; a la Fundación Círculo de Tecnologías para la Defensa y Seguridad; y, por supuesto, tanto al Colegio como a la Asociación Española de Ingenieros de Telecomunicación así como al Instituto de Ingeniería de España. No se olvida de sus compañeros del centro de I+D+I, ni de su familia, mujer e hijas y hermano, Jorge Pérez, con el que asegura haber compartido una buena parte de su trayectoria.
"La transformación digital se ha definido como la integración de las tecnologías digitales en todas las áreas de una empresa entidad o institución para generar cambios fundamentales en la forma en que estas trabajan, incrementando su valor y el valor de sus clientes".
En una breve consideración de la trayectoria de las conocidas como Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, el nuevo Académico explica como la digitalización de dichas TIC "permitió la ruptura de las barreras temporales en el acceso masivo a la información transformando la sociedad y siendo una de las claves, junto a los avances en las tecnologías del transporte, de lo que denominamos globalización".
"El grado de convergencia entre las tecnologías electrónica, telecomunicaciones e informática es tal, que en estos momentos nos referimos a las TIC como Tecnologías Digitales".
Tras su repaso a lo largo de la historia y evolución de las TIC, así como su importancia y aplicación al mundo de la Defensa y Seguridad e incluso al mundo armamentístico, se pregunta cómo asegurar los estándares éticos que exigen a día de hoy las sociedades democráticas. Razonamiento interesante ante el que plantea, como posible respuesta, la propia inteligencia artificial: "Cabe esperar que la generación de algoritmos inteligentes de control predictivo del funcionamiento correcto de estas armas resuelva el problema porque estos algoritmos se lleven a que la prioridad de error esté en unos límites asumibles por criterios éticos y jurídicos".
Concluye su discurso, explicando cómo la aplicación de los últimos avances en las tecnologías digitales permitirá que los sistemas utilizados en las futuras operaciones militares sean varios órdenes de magnitud más eficientes que los actuales operativos, aunque, a su vez, suponiendo importantes retos y desafíos para las organizaciones militares. "En los próximos años se producirá una brecha digital en la inteligencia artificial entre los países que dispongan de una defensa nacional inteligente potente, con unos sistemas militares dotados de inteligencia artificial, personal capacitado para diseñarlos, producirlos y operarlos y recursos invertidos en su despliegue; y otros que no. Las decisiones que ahora se tomen definirán a qué grupo se pertenecerá en el futuro y también el peso de cada país en la nueva economía digital globalizada".
