Dirigida por
D.J. CarusoAño
2008Relación con las Telecomunicaciones
Situación: Dron MQ-9 Reaper en entorno urbano.Situación: Muestra de la tecnología militar real del momento.
Situación: La discreta integración de la tecnología en la sociedad.
Situación: Qué es ficción tecnológica en 2008 y qué es ya factible en el momento de volver a ver la película.
La conspiración del pánico: el FBI puede escuchar su móvil
La idea para la película llevaba años rondando la cabeza de Steven Spielberg. Spielberg partía de la noción de que la tecnología está en todas partes pero ¿qué pasaría si se volviera contra nosotros? ¿Qué pasaría si la tecnología que nos rodea, que nos encanta y de la que dependemos, de repente fuera utilizada contra nosotros y, además, completamente fuera de control?
En palabras del productor Alex Kurtzman, "lo que Steven quería es que la gente saliera del cine y apagase sus móviles y Blackberrys porque estuvieran asustados", algo muy parecido a cuando el público sintió miedo de nadar en el mar tras el estreno en el verano de 1975 de 'Tiburón'.
La historia estuvo en proceso de desarrollo durante varios años pues en la época en que Spielberg concibió la idea no hubiera tenido mucha credibilidad ya que la tecnología no estaba aún tan integrada en la sociedad.
A principios de 2006, Spielberg les llevó el proyecto a Kurtzman y a su socio Robert Orci y optaron por plantearlo como una historia que trata acerca de dos desconocidos, Jerry y Rachel, que se ven unidos a la fuerza, acusados de delitos que no han cometido, que luchan por sus vidas a la vez que tratan de demostrar su inocencia mientras se convierten en marionetas de un enemigo sin rostro que al parecer cuenta con ilimitados poderes para manipular todo lo que hacen. Aparentemente, la voz que les llama por teléfono controla todo lo que hay a su alrededor, desde paneles informativos que les guían a semáforos que hacen que los coches de policía que los persiguen choquen unos contra otros, a grúas, barcos, vagones de metro, todo lo que pueda estar conectado a una red de datos.
Al principio Spielberg tenía la intención de dirigir él mismo la película pero al final cambió de idea y se concentró en otros proyectos, sobre todo en el regreso a la gran pantalla del aventurero Henry 'Indiana' Jones, Jr. en "Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal". Mientras, el director D.J. Caruso estaba rodando su gran éxito de 2007, 'Disturbia', para DreamWorks SKG, la productora de Spielberg.
D.J.Caruso: "Le enseñé a Steven el montaje provisional de Disturbia, y él me dijo: '¿Sabes? Tenemos algo para ti'. Leí el guion y comprendí por qué, cuando tuvo inicialmente la idea, era demasiado avanzada para la época. Me encantó al instante. Estaba la presión añadida de saber que era una historia que Spielberg había estado gestando durante años pero me hizo sentir realmente cómodo. Me dijo que era importante que cada director hiciese suyo cada proyecto. Me dijo. 'Quiero que tomes esta idea y la hagas tuya'. Confió en mí para que fuera y la hiciera y la convirtiese en algo mío, haciendo sin embargo honor a su historia. Nunca he gozado de una colaboración tan fructífera".
D.J.Caruso: "Me pareció que era una historia realmente premonitoria, porque en cierto modo todos somos muy dependientes, y estamos enamorados de nuestros aparatos tecnológicos, como el iPod y el iPhone, y creo que la gente no se da cuenta de lo vulnerables que nos estamos volviendo. Creo que nadie se da cuenta de lo fácil que es para el gobierno, o para quien sea, averiguar lo que hacemos cada día".
Fue Isaac Asimov el primero en proponer una computadora de alcance global, su Multivac, que redireccionara la capacidad humana de gobierno y nos salvara de la estupidez. Multivac aparece en varias historias o cuentos de Isaac Asimov, entre 1955 y 1975. Asimov escogió el nombre de Multivac como referencia a UNIVAC, el primer gran ordenador central fabricado en EE.UU. Si bien inicialmente Asimov pensó el nombre en referencia a "Multiple vacuum tubes" (tubos de vacío múltiples), en "La última pregunta" (1956), se lee que el sufijo -ac vendría de "analog computer" (computadora analógica).
En el cine el personaje de gran ordenador central es una presencia ominosa, fundamentalmente desde El niño invisible (Herman Hoffman, 1957), que culmina en la película que puede considerarse el mejor exponente del tema: La conspiración del pánico.
Vídeos
Jerry Shaw y Rachel Holloman son dos personas sencillas con vidas normales que se conocen en circuntancias desfavorables debido a una serie de extrañas llamadas. Pronto descubren que todos sus movimientos son seguidos por alguien que no conocen y, lo más grave y sorprendente, que están considerados enemigos públicos con nexos con el terrorismo internacional y que se les vincula a una conspiración al más alto nivel gubernamental.
En el Centro de Mando Militar Nacional en el Pentágono, el Secretario de Defensa Geoff Callister se encuentra ante una decisión crucial, cuenta con una asesora tecnológica y un asesor legal pero el Presidente tiene su propio criterio. D.J.Caruso: "Como realizador, intento meter a la gente en ese centro de mando militar, con esos personajes que tienen que tomar esa clase de decisiones utilizando la tecnología y la información que reciben. Podemos estar en esa aldea del Baluchistán, pero para mí se trata más bien del secretario de Estado que tiene que estar en ese centro de mando y tiene que hacer esa llamada basándose en esa información. ¿Qué llamada harías tú basándote en lo que ese personaje sabía? De eso trata en realidad la escena. Al final, la decisión que toma el Presidente en esa escena tiene mucho que ver con lo que le está sucediendo a nuestros dos protagonistas. En cuanto al título, 'Eagle Eye', tiene una connotación de Gran Hermano, el ojo del águila es el ojo del gobierno o el del Gran Hermano vigilándote. En la escena inicial, esa pequeña águila es en realidad un artefacto del ejército que puede enviar señales al centro de mando. Los aparatos que aparecen en la película son una muestra de la tecnología militar real. Los militares nos ayudaron mucho. Nos proporcionaron equipos y asesoramiento".
Rachel Holloman es una madre soltera que por primera vez se ha separado de su hijo Sam de 8 años que viaja con la banda del colegio a Washington a tocar la trompeta en un acto en el Kennedy Center. Rachel ha aprovechado para salir esa noche con sus amigas cuando recibe una extraña llamada en su teléfono móvil: una mujer desconocida le dice a Rachel que obedezca sus instrucciones al pie de la letra o Sam (a quien puede ver en una gran pantalla de televisión al otro lado de la calle) morirá. Por de pronto, ha de dirigirse hasta un Porsche Cayenne negro que está aparcado en las inmediaciones.
Clip: Your phone is being monitored
La secuencia de la persecución fue rodada durante varias semanas con un equipo de 100 personas en el centro de Los Ángeles, simulando ser el de Chicago. La secuencia fue cuidadosamente pensada, planificada y ejecutada. Se calcula que la producción destrozó 38 coches. D.J.Caruso: "Hice un diagrama de la persecución y trabajé con mi equipo de la segunda unidad, y ya sabíamos lo que iba a pasar. Después de haber hecho ese esquema inicial, me dijeron que íbamos a necesitar 11 coches, porque cada uno de ellos tenía que hacer algo especial. Sin embargo, lo que me encantaba era que, una vez que un coche resultaba abollado, lo dejábamos abollado. Eso es lo que hace tan brillante a la persecución de coches de French Connection. El coche está realmente jodido al principio y al final. Así que nos pusimos a ello y pensamos que el Cayenne Turbo es un coche muy rápido que sin embargo nunca ha tenido una gran reputación, así que nos pusimos en contacto con Porsche y se mostraron sumamente dispuestos a colaborar. Nos proporcionaron la mayoría de los coches. Algunos no eran Turbo y tuvimos que hacerlos pasar por Turbo. Le ahorró mucho dinero a la producción y conseguimos un montón de coches para los choques y aunque no reparo conscientemente en la producción, sí que la tengo presente".
Clip: el Porsche Cayenne negro
ARIIA (Autonomous Reconaissance Intelligence Integration Analyst - Analista de Integración de Inteligencia de Reconocimiento Autónomo) es un sistema informático creado para ayudar a localizar a los terroristas pero, después de que desoyendo su recomendación el gobierno ataque por error un objetivo, llega a concluir que Estados Unidos está encaminándose hacia la destrucción y comienza a trabajar por su cuenta para acabar con el gabinete utilizando para ello todos los medios tecnológicos y sistemas informáticos a su alcance. Como interfaz con el mundo físico cuenta, entre otros, con Jerry Shaw y Rachel Holloman.
El MQ-9 Reaper es una 'bestia parda' de 20 metros de envergadura y 11 de largo, con más de 2 toneladas de peso. Es un avión armado multimisión, con techo de vuelo medio, larga autonomía y pilotaje remoto que se emplea principalmente para la ejecución de objetivos en movimiento, además de como activo de inteligencia. Diseñado por General Atomics Aeronautical Systems, entró en servicio en 2007. En 2008, ya estaba en la gran pantalla y desenvolviéndose en entorno urbano.
Clip: Dron MQ9 Reaper, un urbanita de armas tomar
D.J.Caruso: "Cuando comenzamos a hacer nuestra investigación, una de las primeras cosas que leí fue lo de cuando los ferrocarriles de Atlanta pusieron sus primeras líneas de metro. Pusieron una voz masculina para decir a la gente que se apartara de las puertas. La gente no escuchaba a ese tío (risas). Cuando cambiaron a la voz de mujer, que era a la vez suave y autoritaria, la gente se apartaba de las puertas. Diversos estudios han demostrado que la voz de mujer resulta más suave y autoritaria en esas situaciones, y eso influyó mucho en nuestra elección. Al mismo tiempo, la ambigüedad de no saber quién es esa mujer ni para quién trabaja ni cómo funciona todo, parecía más siniestra simplemente utilizando esa voz". Aunque no aparece acreditada, Julianne Moore pone voz a ARIIA.
Audio: The voice of ARIIA (Julianne Moore)
D.J.Caruso: "Quería que las escenas de acción fueran reales, porque soy un gran experto en las viejas persecuciones de coches de los 70, que tienen sencillamente acción real. Cuando los coches chocan y las cosas explotan, me encanta que suceda de verdad y poder fotografiar las cosas. Quería abstenerme lo máximo posible de usar tecnología digital. Así que cuando la grúa atraviesa ese edificio, es una grúa de verdad que atraviesa el escenario que construimos".