Relación con las Telecomunicaciones

Personaje: JOBS, Steven Paul

Personaje: WOZNIAK, Steve

Steve Jobs: el mundo en el bolsillo

Steve Jobs contactó con el escritor Walter Isaacson para que escribiese su biografía cuando asumió que su enfermedad no tenía remedio. La elección del biógrafo de Albert Einstein da la medida de su ego y que lograra convencer a Isaacson tan solo reafirma el gran seductor que era. El libro "Steve Jobs" se fundamenta en más de cuarenta entrevistas realizadas a Jobs a lo largo de dos años, además de entrevistas a más de cien miembros de su familia, amigos, adversarios, competidores y colegas. Isaacson tuvo acceso "exclusivo y sin precedentes" a la vida de Jobs. Si bien Jobs cooperó con la elaboración del libro, no pidió tener ningún control sobre los contenidos, excepto la tapa, y renunció al derecho de leerlo antes de ser publicado.

Y de ese libro parte esta película. Y si la portada del libro nos muestra al personaje de cara y en primer plano, el cartel de la película nos lo muestra de perfil, en plano medio, en la parte inferior derecha pero no porque intente salirse del encuadre sino porque así su figura mantiene en alza los créditos del film.

La clave de la película estriba en el guion de Aaron Sorkin que convierte una biografía en una trama teatral en tres actos. En los minutos previos a tres estratégicas presentaciones, el ordenador Macinstosh (1984), la compañía Next (1988) y el ordenador iMac (1998), los fantasmas y cadáveres de Jobs aparecen en escena para confrontarse con él en un relampagueo de réplicas y contrarréplicas que, en el aspecto narrativo, cincelan el personaje de Steve Jobs según ese arquetipo de protagonista que dice: "no importa si el comportamiento es mezquino porque si tiene talento profesional la empatía del espectador está garantizada".

Como poso reflexivo, la frase que "Woz" espeta cuando en el tercer acto abandona la sala y la lucha ante el genio, el tirano, el sensible, el pionero, el ladrón, el padre, el amigo, el irreductible, el hombre complejo: "No es binario, Steve: es posible tener talento y ser decente".