Descripción
Biografía
Robert Hooke nació el 18 de julio de 1635 en Freshwater, una pequeña localidad de la isla de Wight, como el menor de cuatro hermanos. Hijos de Cecily Gyles y John Hooke, párroco de la Iglesia de Todos los Santos, una iglesia bien acomodada, con un patrocinio del St John’s College de Cambridge. La infancia de Robert estuvo marcada por una salud frágil que le mantuvo alejado de los rigores de la vida escolar y por la temprana muerte de su padre.
En 1648, falleció su padre y Robert heredó 40 libras que usó para trasladarse a Londres. Allí comenzó siendo aprendiz del pintor Peter Lely, pero pronto tuvo que dejarlo por problemas de salud causados por los óleos. Después, ingresó en la Westminster School donde aprendió geometría y lenguas clásicas.
En 1653, ingresó como organista y cantor coral en la iglesia Christ Church de la universidad de Oxford, lo que le permitió matricularse y alojarse sin coste. Allí encontró un ambiente académico privilegiado. Desde 1655 hasta 1664, ejerció como ayudante de Robert Boyle, construyendo la bomba de aire que permitió los conocidos experimentos sobre la elasticidad del aire y la presión.
En 1660, descubrió su ley de elasticidad, conocida como ley de Hooke, que establece que el estiramiento de un cuerpo sólido es proporcional a la fuerza que se le aplica. Esta ley sentó las bases para los estudios de tensión y deformación, así como para la compresión de los materiales elásticos. Ello permitió el desarrollo de los primeros relojes verdaderamente precisos y se usa, entre otras cosas, en la ciencia de materiales y en la ingeniería y la construcción.
En noviembre de 1660, con la restauración de la monarquía, participó en la creación de la primera sociedad científica de la historia, la Royal Society. En 1662, obtuvo la Carta Real que formalizó la Sociedad y, ese mismo año, Robert Moray propuso nombrarlo Curador de Experimentos. Hooke aceptó, sin retribución inicial, con la misión de presentar varias demostraciones de gran envergadura en cada reunión y gestionar la galería de objetos curiosos. En 1664, se le asignó un salario anual combinado de 80 libras, compartido con Sir John Cutler a cambio de conferencias sobre artes mecánicas.
Entre 1663 y 1664, hizo sus observaciones microscópicas y algunas astronómicas, que recopiló en enero de 1665 en Micrographia, el primer gran tratado del mundo microscópico. En él se describen cincuenta y siete observaciones microscópicas y tres telescópicas, que incluyen cincuenta y ocho grabados hechos a partir de los extraordinarios dibujos de Hooke. En sus páginas aparece por primera vez el vocablo “célula” para describir las diminutas cavidades del corcho. es el primer gran tratado del mundo microscópico.
En marzo de 1665, Hooke fue nombrado Profesor de Geometría en el Gresham College, cargo que mantuvo hasta su muerte.
En septiembre de 1666, tras el Gran Incendio de Londres, fue nombrado Inspector Urbanístico Principal para la reconstrucción de la ciudad, colaborando estrechamente con el arquitecto Christopher Wren. Hooke trazó calles, solares y proyectó edificios como el Royal College of Physicians, aplicando allí sus conocimientos de mecánica de materiales.
Durante la década de 1670, continuó explorando óptica y mecánica celeste. En 1672, descubrió el fenómeno de la difracción de la luz, apoyó la teoría ondulatoria de la luz y cuestionó públicamente la teoría corpuscular de Isaac Newton, lo que provocó que comenzara una polémica confrontación entre ambos sobre prioridades y demostraciones matemáticas, una de las disputas científicas más célebres del siglo XVII, que ensombreció el legado de Hooke y culminó en enemistad entre ambos científicos.
En 1677, tras haber ocupado provisionalmente Hooke el cargo de secretario en la Royal Society, fue nombrado secretario adjunto, presentando además conferencias sobre una amplia variedad de temas: micrometría astronómica, paleontología y memoria humana, introduciendo conceptos sorprendentemente modernos sobre codificación y olvido. Gracias a él, la Royal Society pudo convertirse en unos pocos años en el centro de la ciencia europea.
En 1678, estudió la gravedad y la astronomía, deduciendo que la gravedad obedece a una ley de la inversa del cuadrado y posiblemente fue el primero en plantear la hipótesis de tal relación en el movimiento planetario, un principio que Newton promovió y formalizó en la ley de gravitación universal.
En 1687, Newton publicó su libro "Philosophiæ Naturalis Principia", que contenía su ley de gravitación universal.
La tensión Newton y Hooke explotó cuando Newton publicó su libro "Philosophiæ Naturalis Principia", en 1687, que contenía su ley de gravitación universal. Newton no fue el primero en postular sobre la fuerza que mantenía a los cuerpos celestiales en su lugar, era una idea que la comunidad científica había estado desarrollando durante años... y Hooke había sido clave en ese desarrollo durante la década de 1670, cuando señaló que los planetas eran atraídos por el Sol y que esa fuerza era más fuerte entre más cerca estuvieran los objetos. Hooke estaba convencido de que Principia habría sido imposible sin su contribución y se quejó de que no se le había dado suficiente crédito por la ley, alimentando una rivalidad que mantuvieron ambos científicos, que se sumó a otras disputas con diversos científicos como Johannes Hevelius, Christian Huygens y Henry Oldenburg, entre otros. Disputas que casi siempre tuvieron su origen en las reclamaciones de Hooke, en relación con la prioridad sobre determinados descubrimientos.
A lo largo de su vida, Hooke registró numerosas patentes e inventos: el telescopio reflectante, el microscopio compuesto, la articulación universal (junta de cardán), el primer barómetro de mercurio, el higrómetro, el anemómetro y refinamientos en cronómetros con péndulos y resortes de equilibrio. En 1684, Robert Hooke presento a la Royal Society un sistema de telégrafo óptico, que no tuvo buena acogida. Aunque Hooke tuvo la idea, sería Claude Chappe quien la llevaría a la práctica años más tarde.
Robert Hooke murió repentinamente en Londres el 3 de marzo de 1703, a los 67 años.
Se atribuye a Newton un empeño notable por borrar la figura de Robert Hooke de la historia de la Ciencia, un objetivo cuyas puertas se le abrieron definitivamente, cuando en 1703, el mismo año de la muerte de Hooke, Newton fue nombrado presidente de la Royal Society. Isaac Newton lo detestaba tanto que mandó retirar su retrato y quemarlo Era el único retrato que existía de él. Sea como fuere, con el tiempo, a medida que la buena reputación de Newton crecía, la de Hooke se deterioró. Su disputa contaminó más de 200 años de literatura científica, quedando como un investigador olvidado. Su figura comenzó a rescatarse a mediados del siglo XX, dando lugar a que su legado multidisciplinar haya sido comparado con el de Leonardo da Vinci.
En honor de Robert Hooke, el asteroide (3514), un cráter lunar y otro marciano llevan su nombre; la Sociedad Británica de Biología Celular estableció la Medalla Hooke, un premio anual de que reconoce a «un líder emergente en biología celular». En High Street de Oxford, se instaló una placa con los nombre de Boyle y Hooke.
Más información:
- Artículo publicado en BBC News.
- Artículo publicado en Intoxicating Spaces.
- Artículo publicado en National Geographic.
- Artículo publicado en Naukas.
- Biografía publicada en Biografías y vidas.
- Biografía publicada en Britannica.
- Biografía publicada en MCN.
- Biografía publicada en el Instituto de Matemáticas de la UNAM.
- Biografía publicada en el Aula Cultural de Divulgación Científica de la Universidad de La Laguna.
- Fuente de imagen.
- Artículo seminal 'How to Communicate One's Mind at Great Distance'.